Paso 1: Identifica los momentos clave
Cuando pienses en la música de tu boda no te limites solo a la playlist de la fiesta. Cada instante, desde que los invitados llegan hasta que se despiden, merece su propio soundtrack. Los momentos más destacados suelen ser la fiesta, el banquete, el cóctel y la ceremonia, pero hay otros que también puedes musicalizar para enriquecer la experiencia, como el previo de la ceremonia, la sobremesa, los traslados de los invitados o hasta para los baños. Cada detalle cuenta.
Paso 2: Piensa en sentimientos, no en canciones
Una vez que tengas claros los momentos a musicalizar, enfócate en lo más importante: ¿qué emociones quieres evocar en cada uno de esos momentos? La música es el catalizador de emociones por excelencia, y si eliges bien, cada instante de tu boda quedará grabado en la memoria de tus invitados. Primero define el sentimiento que deseas transmitir y luego imagina el ambiente que esa emoción generará. Eso debe guiar tu selección musical.
Paso 3: Elige el género musical
Con el sentimiento y el ambiente definidos, es hora de relacionarlos con un género musical. Saber lo que quieres transmitir facilita la elección del género. Por ejemplo, un cóctel puede ser relajado con música suave de fondo, o vibrante con ritmos más envolventes. El género musical debe ajustarse al ambiente que deseas crear en cada momento de la boda.
Paso 4: Selecciona artistas y canciones
Con el género musical elegido para cada momento, ahora puedes seleccionar los artistas y las canciones que mejor se adapten a tus necesidades. Crea una playlist específica para cada momento y compártela con tus proveedores. Dedica tiempo a explicar por qué elegiste ese tipo de música para cada ocasión. Cuanto más contexto le des a tu grupo o DJ, mejor entenderán cuándo utilizar cada canción. Organiza todo en playlists separadas en Spotify para minimizar cualquier riesgo de confusión.
Paso 5: Confía y disfruta el momento
Una vez que todo esté en marcha, confía en los profesionales que has elegido y disfruta tu día. Si algo no sale como lo planeado, recuerda que solo tú lo sabes; tus invitados no notarán los pequeños errores a menos que tú se los señales.